Es maravilloso ser profesor. Da sentido a la vida. Se sacrifica mucho y se recibe mucho a cambio. Ahora somos lo más importante del país. Debemos sacrificarnos y trabajar más que nunca. El alcalde vino esta mañana y hablo del deber. Yo preferí usar la palabra profesión. Hay que quemar esos libros y así lo haremos. No podemos resistir físicamente... (continúa)