- ¿Y si nunca me hubieras conocido?
- ¿Entonces qué?
- Pues que ahora le estarías contando eso a otra.
- No hace falta que lo digas si no quieres escucharlo.
- No quiero escuchar nada, quiero saber lo que sientes.
- Muy bien, siento? siento que tú eres la mejor.
- Tus sentimientos, ¿quiénes son tus sentimientos?
- Pues yo, el corazón.
-... (continúa)