Me encanta esta sensación, mis pies sobre el asfalto blando por el calor primaveral, la suave brisa que te recorre todo el cuerpo, especialmente la entrepierna, sientes un inmenso poder al estar desnudo bajo las estrellas mientras un gigante vestido de ciudad sortea los coches a su alrededor. No pienso en nada mientras me la estoy meneando, no... (continúa)