En África el único modo de superar el dolor es salvar una vida. Si alguien es asesinado el año de luto termina con un ritual llamado la prueba del ahogado. Se organiza una fiesta junto al río. Al amanecer, al asesino le meten en una barca lo adentren en el río y lo lanzan atado para que no pueda nadar. La familia del difunto tiene que decidir... (continúa)