Y el motivo de todo, era el dinero. ¿Qué coño pintábamos nosotros en aquel desierto si no? Esa era la razón de todas las luces, y las ofertas de las agencias de viajes, y el champán, y las suites de hotel gratis, y el espectáculo. Todo está pensado para que nos llevásemos su dinero. Esa es la verdad sobre Las Vegas. Somos los únicos que ganamos.... (continúa)