Cuando el rey Lear muere en el quinto acto ¿sabes cómo lo expresó Shakespeare? Escribió: muere. Eso es todo, nada más. Sin fanfarrias, sin metáforas, sin brillantes palabras finales. Sin embargo, cada vez que leo esa palabra, me invade un infinito sentimiento de tristeza. Ya sé que es natural sentirse triste, pero no por la palabra muere, sino... (continúa)