En los autobuses hace mucho calor, hay mucho ruido y esta lleno de gente. Y deseas bajar más que nada en el mundo. Si no lo haces es porque todavía te faltan 50 paradas para llegar a donde quieres ir. Yo puedo bajarme cuando quiera. Cuando ya no pueda más, esa será mi parada. Y ya no puedo más, porque aunque pasen otros 50 años seguiré estando... (continúa)