Ahora tengo la impresión de que mi vida ha sido una serie de pequeños fracasos. Las mujeres que no supe amar, las oportunidades que no supe atrapar, los instantes de felicidad que dejé pasar. Sabía el resultado de la carrera, pero era incapaz de apostar por el ganador. Estaba ciego y sordo o era necesario la luz de la desgracia para enseñarme mi... (continúa)