- El valeroso Sir Robin huyó...
- ¡No!
- Valientemente huyó...
- ¡No lo hice!
- Ante el peligro el rabo entre las piernas metió, y corriendo salió, dio media vuelta y gallardamente se escabulló...
- ¡Que no!
- Valerosamente se acobardó, valientemente se batió en retirada, el más valiente de los valientes, Sir Robin.
- ¡Yo nunca!